El año ha estado competitivo, hemos estado en la parte de arriba y excepto partidos puntuales que nos hemos dejado puntos, que nos hubiesen dado algún puesto más en la clasificación, hemos competido en todo y hemos estado muy decentes.
Al juntar dos edades tan distintas, al menos, han hecho buen grupo y se han entendido bien al final. Han hecho buenos partidos al mezclarse.
Los chavales de segundo año que al año que viene pasan a ser juveniles tienen muy buenas condiciones, son muy aplicados, muy trabajadores, y pueden aportar cosas al juvenil.
Sobre todo en estas dos edades, cadete y juvenil, lo pensamos en la escuela, es una edad para competir y donde mejor se aprende es en categorías superiores y que te aprieten y te exijan más.